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Comunicación audiovisual, Ciber/Hackfeminismo y TRIC para el desarrollo | Marta García Terán

Feria de invierno

La feria llevaba instalada en el parque central ya varios días, pero por ser sábado, la gente buscando diversión, se apelotonaba junto a los puestos de mercadería, el tiro al blanco, la noria y el carrusel. Tras una tromba de agua, el fresco permitía estar en la calle, atrás habían quedado los calores y bochornos típicos de abril.

Había quienes comían palomitas, quienes degustaban algodón de azúcar y quienes sólo miraban pasar a las chavalas y chavalos que aprovechaban la noche sabatina para vagar en las calles. El ambiente festivo pronto se tornaría lúgubre, pero nadie, ni en las bancas ni en los chinamos, lo sabía aún.

El carrusel giraba y giraba al ritmo de la música de bachata del puesto de hamburguesas y slides de pizza. Se escuchaban los disparos del tiro al blanco y los quejidos al recibir los premios nimios después de tanto apuntar. Las risas de la chavalada en los bancos del parque lo inundaban todo, y entre la algarabía una niñita le pedía a su papá que la comprara un boleto para subir a uno de los caballitos del carrusel.

Tras el canje, padre e hija esperaron que el carrusel dejara de girar. La niña emocionada saltaba a cada subida y bajada ya imaginándose amazona. Por fin el carrusel paró, encaramada en su padre, la niña alcanzó la barra de un caballito al galope con dientes pelados, de marrón pelaje de plástico. La niña reía como las chavalas y chavalos lo hacían unos minutos antes. Clac clac sonaban los disparos, pop pop el maíz estallando y seguía la música de bachata de los puestos de comida.

El carrusel giraba, arriba y abajo el caballito con el ji ji ji de la niña hasta que en un clac entre canción y canción de bachata, lo que se escuchó fue un desgarrador ahhhhhhhh. El silencio reinó. Todo quedó parado, todo excepto una víbora que cayó bajo el caballito de dientes pelados y plástico marrón. Tras el profundo llanto de la niñita se supo que la víbora llevaba horas en la panza metálica del caballito, refugiándose de la lluvia y esperando una piernita sonrosada y regordeta con la que divertirse en la feria, en esta noche fresca de invierno.

Carrusel

Foto por Jana en Pixabay

Cuentito inspirado en Somoto, en una noche fresca junto a un carrusel en el parque central. Musa Martha Cecilia Ruiz.

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Esta entrada fue publicada en 21 junio, 2014 por en Cuentos propios y etiquetada con , , , , .

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Marta García Terán

Marta García Terán

Comunicóloga audiovisual. Bilbaina en Nicaragua. Proactiva, prosumidora, knowmad. (Ciber)feminista. Migrante y escribiente.

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