Comunicación audiovisual, Ciber/Hackfeminismo y TRIC para el desarrollo | Marta García Terán
Una de mis alumnas en el I Diplomado de Comunicación Digital Estratégica, María Acuña, quien es periodista y docente universitaria, está realizando una Maestría en Educación Superior y por eso me contactó hace unos días.
En una de las asignaturas que está llevando es sobre el rol del personal docente en la Educación Universitaria y le pedían hacer una especie de estudio de caso relacionado con prácticas en la docencia que le han resultado provechosas para el Proceso Enseñanza-Aprendizaje (PEA). Conclusión, María eligió entrevistarme a mí porque la metodología y actividades que utilicé en el Diplomado la llamaron la atención.
Al compartirle mis respuestas a sus preguntas, ella me pidió escribir un post al respecto, pero sinceramente, releyendo la entrevista, creo que es mejor dejarla tal cual es, como entrevista. Pasen y lean:
María Acuña (MA): ¿Sus competencias para educar tienen alguna base en la formación docente?. Si no es así, ¿como las ha desarrollado?
Marta García Terán (MGT): No tengo formación en docencia y pedagogía, pero siempre he observado las herramientas y estrategias que las y los diferentes docentes que a lo largo de mi vida he tenido ponían en práctica para rescatar las que finalmente considero que pueden ser efectivas. También confieso que me gusta leer sobre temas relacionados con la educación sobre todo ligada al audiovisual y a la aplicación de TIC.
En general como alumna nunca me gustó que las clases fueran unidireccionales y de solo «escuchar” al docente, porque así no son los aprendizajes en la vida real, sino que es a partir de la vivencia y el aprender haciendo como realmente asimilamos las cosas nuevas. En definitiva, ahora que soy docente lo que pongo en práctica son las estrategias y métodos con los que a mí me ha gustado aprender y, sobre todo, con los que me he divertido aprendiendo.
MA: ¿Qué estrategias (métodos) utiliza para estimular en sus alumnos el aprendizaje con contenido que imparte?
MGT: Lo que siempre he tenido claro es que a la hora de explicar conceptos hay que hacerlo de manera sencilla y clara, y si puede ser con soporte visual mucho mejor. El utilizar vídeos en el aula además de apoyar visualmente a las explicaciones, hace que las y los alumnos vean más puntos de vista sobre la materia, diferentes a los que yo pueda dar como docente.
Además, para romper la unidireccionalidad, aplico la lógica de la construcción colectiva del conocimiento. Esto es esencial para que las y los alumnos entiendan que desde el empirismo sabemos muchas cosas, y que el personal docente está ahí para guiar y ayudar a ordenar esa información. El uso de brainstormings por ejemplo permite que las y los alumnos se apropien de la clase y participen desde el minuto cero, lo mismo con el trabajo en grupos.
El dejar espacios para el debate y reflexión (bien en el aula o fuera de ella a través de entornos virtuales) ayuda también a interiorizar los aprendizajes y se consigue que las y los alumnos investiguen por su cuenta sobre la materia para poder aportar más ideas a la discusión. En el fondo es apoyar en el desarrollo del pensamiento crítico, clave en la educación.
MA: ¿Atribuye su éxito en su labor docente a sus características personales no relacionadas a la preparación intelectual? Sí es así, ¿en qué medida?
MGT: Yo diría que 50 y 50. La formación y experiencia profesional a la hora de ponerte delante de un grupo en un aula es esencial en cuanto al manejo del tema que se aborda, las explicaciones, el ubicar ejemplos, etc. La expertise hace que puedas ser docente de una materia determinada. Sin embargo, la forma en la que se desenvuelve la persona es vital para entablar una relación de igualdad y respeto con las y los alumnos.
Que yo sepa de un tema concreto porque me he formado sobre él y tenga varios años de experiencia al respecto, no significa que soy mejor persona que quienes tengo delante de mí en el aula, que tenga la verdad absoluta al respecto, o ni mucho menos, que deba ser autoritaria o tajante en las explicaciones.
El entender que no lo sé todo sobre la materia en cuestión, que desde la docencia es importante escuchar a las y los alumnos, y que el respeto y la amabilidad son importantes en todos los aspectos de la vida (aunque parezca mentira decirlo), hacen que sea más humana a la hora de ponerme al frente de una clase, y me permite empatizar con mis alumnas y alumnos, ajustarme al grupo (yo misma y la propia metodología) y por tanto optimizar los aprendizajes mis alumnas y alumnos.
MA: ¿Qué estrategias de su proceso de aprendizaje (cuando ha estado de alumna) rescata cuando asume el rol de docente?
MGT: Rescato la participación de una forma distribuida, no todo es permitir que una alumna o alumno salga al frente a decir lo que opina sobre un tema determinado o a responder preguntas relativas al conocimiento de la materia, sino que la participación también es el trabajar activamente en los grupos, preguntar dudas o responder dudas de las y los compañeros, escuchar activamente las explicaciones y los materiales audiovisuales.
Rescato también la creatividad, el permitir por ejemplo a las alumnas y alumnos que los trabajos a entregar, sean en el formato que quieran y en el que se sientan más cómodas (aunque reconozco que todavía muchas personas no están preparadas para esto y siguen prefiriendo entregar ensayos escritos, pero, poco a poco).
Rescato el valorar el bagaje de los y las alumnas, sus experiencias y sus opiniones, porque como ya he dicho, ni yo lo sé todo, ni quienes llegan a mis clases están en blanco.
Ejemplo de trabajo colaborativo entre las y los alumnos del I Diplomado de Comunicación Digital Estratégica durante la asignatura Principios de la Comunicación Digital Estratégica que yo impartí.
MA: ¿Cómo es el proceso?, ¿lo asume como valioso mientras recibe la instrucción o lo piensa o recuerda cuando está planificando un contenido a impartir?
MGT: Como ya he dicho siempre que recibo clase intento asimilar qué métodos y procesos disfruto como alumna, de manera que a la hora de ponerme delante de un grupo como docente los pueda replicar. Lo mismo ocurre con las metodologías que me resultan aburridas, intento descartarlas cuando comienzo a planificar un contenido a impartir.
MA: ¿Cuál es su método o forma que ha adoptado para evaluar su propio desempeño docente?
MGT: In situ mientras estoy dando clase intento adaptarme al grupo que tengo delante. Quiero decir que si veo que las personas no se concentran por la razón que sea sé que no lo estoy haciendo bien. Entonces cambio el formato: si estaba dando una charla (en general es cuando más se aburren, por la unidireccionalidad), ubico por ejemplo un vídeo o les conformo en grupo para que debatan entre ellos.
La metodología no está escrita en piedra, al final lo que una quiere es que al terminar la asignatura las y los alumnos hayan ampliado su conocimiento sobre el tema en cuestión independientemente de cómo haya sido este proceso. Volviendo al tema, cuando delante de mí hay un grupo que pregunta, participa, se ayuda entre sí a entender los conceptos y la materia, sé que estoy haciendo mi trabajo.
MA: ¿De qué forma siente que sus alumnos evalúan su enseñanza?
MGT: Con el feedback propio que acabo de explicar: unas alumnas y alumnos activos, que preguntan, que quieren ampliar la información (dentro y fuera de clase), o que no quieren dejar el aula a pesar de haber concluido la hora de formación, es síntoma de que aprecian mi esfuerzo como docente. Por supuesto siempre hay quien llega y te lo dice de viva voz o usando los mecanismos estipulados como los entornos virtuales o el mail.
En general, tras varios años dando capacitaciones y clases, puedo decir que siempre he tenido buena retroalimentación, no llegan todas y todos a decirme, pero de grupos de en torno a 20 personas siempre 4 ó 5 se acercan a mí para agradecer la formación, los métodos y mi disponibilidad, así que algo estaré haciendo bien.
Aclaraciones finales: El enfoque de derechos humanos es el que me ha hecho ser horizontal, tener en cuenta que todas las personas están al mismo nivel y respetar las visiones y oponiones de las demás. Eso lo he llevado a la didáctica en los talleres y formaciones que he dado por años, y por supuesto en esta mi primera experiencia universitaria.
Quien escribe es la profesora Liset Perdomo, soy la docente que facilita el Módulo de Didáctica en la maestría en Educación Superior que se está impartiendo en la UdeM, me sentí muy motivada por la entrevista que presentó la profesora María. Realmente cuando el profesor es un modelo de buenas prácticas los impactos en sus estudiantes son positivos, y esas buenas prácticas se reproducen y repercuten en la profesionalidad del docente.
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Gracias Liset por tu comentario, efectivamente reproducimos los modelos con los que aprendemos, por eso es importante partir de las formas en las que nos hemos divertido aprendiendo para que como docentes podamos preparar metodologías atractivas que mantengan a nuestras alumnas y alumnos interesados y con ganas de saber más sobre los temas abordados.
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