Comunicación audiovisual, Ciber/Hackfeminismo y TRIC para el desarrollo | Marta García Terán
Esta semana en mi columna en diario Metro hablo de la necesidad de ser conscientes de la información que vamos dejando en Internet y cómo el eliminarla y almacenarla debe estar entre nuestras tareas de rutina. Pasen y lean:
El otro día en clase tenía una conversación con las y los estudiantes a cerca de cada cuanto tiempo deberíamos hacer un back up o respaldo general de nuestra información en línea. Algunas personas afirmaban que lo hacían “a menudo” pero después confesaban utilizar plataformas como Dropbox o Drive para guardar su información más sensible.
En ese momento les comenté que hay iniciativas online para promover la rutina de respaldar nuestros datos cada semana, en concreto cada lunes y hacerlo en lugares seguros (no online con empresas no seguras). Si suelen utilizar Twitter, les recomiendo seguir la etiqueta #BackupMonday.
Mientras hablaba de estas cosas que tienen que ver con nuestra privacidad y seguridad, me daba cuenta de que en general no le dedicamos tiempo a ser conscientes de la cantidad de información nuestra que dejamos día a día online. Por ello no nos damos el tiempo de ordenarla, archivando lo que amerite ser archivado y eliminando lo que ya no vamos a utilizar ni necesitar. Es complejo, yo misma no soy tan organizada a pesar de ser consciente, sin embargo, hay que darnos el tiempo de hacerlo.
Si quieren intertarlo, les sugiero pasen primero por la web del proyecto «Yo y mi sombra» de Tactical Tech, desde la que esta organización promotora de TIC para el activismo nos ayuda a controlar nuestros rastros digitales, comprobar si nos están rastreando y, en general, aprender sobre la industria de datos.
En la web del proyecto nos explican que los rastros digitales, también llamados ‘rastros de datos’, son aquellos que vamos dejando a través de nuestra computadora, teléfono celular y otros dispositivos.
“Cuando se juntan tus rastros digitales para crear historias o perfiles sobre ti,” explican, “éstos se convierten en sombras digitales y proporcionan a las demás personas una visión sobre tu vida que no necesariamente es la verdadera. De cualquier manera, una vez ‘allí afuera’, son casi imposibles de controlar”.
En la web podemos ver si nos están rastreando bien por el servicio de geolocalización, bien por la navegación. Nos explican porqué es importante preocuparnos por esto y nos dan tips y herramientas que podemos utilizar para para saber si nos está ocurriendo.
Podemos también leer las políticas de privacidad de diferentes plataformas, Facebook entre ellas, para ser más conscientes de lo que aceptamos al crear una cuenta en ellas. “Las políticas de privacidad son largas y confusas. Tendemos a simplemente hacer clic en ‘Estoy de acuerdo’. Sin embargo, cuando entregamos nuestros contenidos personales -nuestras fotos, correos, CVs- a una empresa comercial, deberíamos saber qué les estamos permitiendo hacer con ese contenido” dicen en la web.
Para quienes todavía tengan dudas de lo que les estoy contando, les animo a que lean el post “7 cosas que sabemos que nos vas a decir” con el que desde Tactical Tech han previsto resistencias que tenemos para tomar acción en cuanto a nuestra privacidad y seguridad. Desde el “no tengo nada que esconder” hasta el “a quién le va a importar lo que yo hago”.
Para quienes creen eso de “sólo es Internet” les dejo uno de los argumentos: “Internet te rodea y tus rastros digitales se han convertido en tu reputación. Hasta cuando te retiras de la computadora (ordenador) y teléfono y te vas de casa, una cámara CCTV registra tu cara cuando entras en el metro; tu tarjeta de transporte es fichada; y cuando llegas a tu destino, tu amigo/a te toma una foto, te etiqueta y lo publica en Twitter”.
Conclusión, es bueno que tomemos conciencia de toda la información sobre nosotras y nuestras vidas que vamos dejando online, que tomemos acción para minimizarla en la medida de lo posible, y además nos tomemos un tiempo para eliminar lo que no es necesario y archivar en lugar seguro aquello que sí nos va a servir en un futuro.
Para terminar, piensen qué pasaría si hoy pierden su celular. ¿Cuanta información perderían? ¿Tienen guardadas las fotos, los videos en un lugar seguro? Aprovechemos el próximo #BackupMonday.