Comunicación audiovisual, Ciber/Hackfeminismo y TRIC para el desarrollo | Marta García Terán
Quería iniciar una revolución, utilizar el arte para construir el tipo de sociedad que yo misma imaginaba.
Yayoi Kusama
Hace unas semanas tuve la oportunidad de ver la retrospectiva de Yayoi Kusama en el Guggenheim y la verdad que no había tenido la oportunidad de repensar lo que vi y como me interpelaron sus obras.
No puedo decir que me gustó todo lo que vi, pero su que me fascinó su capacidad para poner títulos a sus obras (rozando la poesia), me encantaron algunas de sus esculturas (calabazas ♡, fálicas, pulpescas…), aluciné con su capacidad de crear volúmenes en algunos de sus cuadros y definitivamente me interesó su concepto de obliteración (liberación del yo como sanación grupal, en pocas palabras, en la praxis puntos y más puntos).
No ha sido hasta esta semana que, buscando en la biblioteca del barrio nuevas lecturas para mis días libres, me he topado con su biografía en forma de novela gráfica: «Kusama. Obsesiones, amores y arte» de Elisa Macellari, una belleza.
Qué triste es saber que tan rápido llegó a la cima en la Nueva York de los 60, como que se olvidaran de ella. Qué alegre saber que rompió esquemas en el arte y la cultura, y que ahora (aún activa y «emitiendo» desde un sanatorio) es reconocida.
En la novela se profundiza en sus problemas de salud mental y la relación de estos con su arte, dejando patente otro montón de intersecciones que no se lo pusieron fácil a la hora de dedicarse a lo que ella quería, ser artista.
Ningún dolor podrá hacerme desistir. Así nací, así he vivido y es así que seguiré viviendo.
Yayoi Kusama
Una jefaza multidisciplinar que pivota desde el audiovisual al happening, desde la escultura a la pintura, conspirando revoluciones y definitivamente politizado lo personal. Todavía quedan unas semanas para ver la expo en Bilbao, y siempre podéis buscar en vuestra biblioteca de barrio a ver si está su biografía gráfica :-).